Al abordar el tema de cómo traducir a los clásicos, debemos recordar que no sólo estamos discutiendo posiciones teóricas, sino también estrategias pragmáticas que dan forma a la experiencia de individuos concretos. (J. M. Coetzee)

Mart. 9, 37

Aunque mientras estás en tu casa te emperifollan en plena Subura,  aunque te fabrican los pelos que te faltan, aunque por las noches te sacás la dentadura, como si se tratara de un vestido de seda, aunque te conservás en cien frascos de formol, aunque tu rostro no duerme con vos, igual me hacés señas, levantando las cejas que te colocan por la mañana. No sentís el más mínimo respeto por la canicie de tu concha, a la que ya podés contar entre tus abuelos. Me prometés el cielo, pero mi pija es sorda, y, por más que sea tuerta, igual puede verte.

Cum sis ipsa domi mediaque ornere Subura,
    Fiant absentes et tibi, Galla, comae,
Nec dentes aliter quam Serica nocte reponas,
    Et iaceas centum condita pyxidibus,
Nec tecum facies tua dormiat, innuis illo,
    Quod tibi prolatum est mane, supercilio,
Et te nulla movet cani reverentia cunni,
    Quem potes inter avos iam numerare tuos.
Promittis sescenta tamen; sed mentula surda est,
    Et sit lusca licet, te tamen illa videt.

2 comentarios:

  1. Me gusto que hayas elegido decir la canicie en lugar de las canas de tu concha (que habría sido mas fácil pero menos potente), el diablo esta en los detalles...

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  2. Gran blog,felicitaciones! Ya mismo se lo estoy siguiendo.

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